El arduo trabajo de la creación

¡ Buscar la luz, la claridad del cielo !. ¡ Estar en paz contigo mismo !

Si, parece sencillo, solo es contemplar las nubes.

Sólo es sentarse en tu sillón preferido y empezar a leer un libro, o saborear un whisky mientras ves como el sol se va escondiendo.

Esto esta muy bien para quien no es creador.

Pero para algunos artistas puede ser un infierno, sobre todo para los mas perfeccionistas , mas obsesivos con su trabajo.

Para que la gente disfrute con sus obras, hay en los creadores una angustia vital que no termina hasta que acaba su obra.

Edvar Munch, por ejemplo, cuya obra mas conocida es “ El grito “, se negó a que le trataran de sus problemas mentales porque estaba convencido de que si le curaran no volvería a pintar como lo hacia hasta ahora. Se aprovechaba de sus propias afecciones con el único fín de crear.

Y, así, se podrían citar infinidad de casos de artistas que solo viven para  y por su obra. 

Para buscar la luz, antes se debe atravesar las tinieblas, luchar contra tus propios demonios, intentar apagar el volcán en erupción que hay en tu interior para sacar a relucir tu talento.

¿ No debemos, pues, celebrar, elogiar a los grandes creadores del mundo por su gran labor para que, nosotros nos sintamos a gusto contemplando sus obras ?.

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